Bizcochuelo de cacao:

1) Batimos los huevos junto con el azúcar hasta llegar a punto letra (muy espumoso). Preferentemente con batidora eléctrica.
2) Tamizamos los secos y los incorporamos al batido de huevos con movimientos envolventes (en 2 o 3 veces). Es importante que cuidemos el aire que ganamos en el batido, ya que el bizcochuelo crece por este y no por usar harina leudante o polvo de hornear.
3) Vertemos la mezcla en un molde de 20 cm. Previamente enmantecado y enharinado.
4) Horneamos a 170° por aproximadamente 25-30 minutos, o hasta pinchar y que el palillo salga seco.

Almíbar de kirsch:

Empezamos aclarando que el kirsch es un aguardiente de cerezas, este no es obligatorio en la receta, pero es lo más clásico. (Usen el sabor que quieran, ralladuras o esencias).
1) Colocamos el azúcar y el agua en una olla. Dejamos hervir 1 minuto y retiramos.
2) Agregamos el kirsch.
3) Utilizamos tibio.

Crema Chantilly:

1) Batimos la crema fría junto con el azúcar hasta que quede bien firme.
2) Cortamos las cerezas en pedacitos o en mitades.

Armado:

1) Cortamos el bizcochuelo en 3 capas iguales. Humedecemos cada una con el almíbar de kirsch.
2) Rellenamos con crema chantilly y arriba de esta distribuimos las cerezas cortadas, logrando las dos capas de relleno y 3 de bizcochuelo.
3) Cubrimos con más crema, o ganache de chocolate.
4) Decoramos con manga, cerezas y chocolate rallado. ¡Y listo!